LA CIGÜEÑA

Por fin llegó ¡¡¡MATEO!!!, fue muy "tardón", se parece a su mamá, ninguno de los dos son muy puntuales. Estuvo muchas horas jugando al cú-cú, trás-trás, parecía que salía... y volvía a entrar, es muy listo, al parecer no le gustaba mucho cómo andaba este mundo.
Al final tuvieron que sacarle mediante cesárea, fue lo mejor, su mami estaba agotada, había aguantado 24 horas de espera. La anestesia no funcionó bien, pero ella, después de tanto tiempo, no quería perderse el primer segundo de vida de su hijo, así que apretó los puños y aguantó. Cuando ya vio a su niño, le pidió a los médicos que le pusieran un poco más de anestesia, le dolía, ellos la miraron asombrados ¿cómo puede ser?, aún no había podido pasar el efecto, ella les dijo que le había estado doliendo todo el rato, ¿y cómo no has dicho nada? preguntaron, mi sobrina contestó que no quería perderse el nacimiento de su hijo.
A las dos horas ya se le había olvidado todo, estaba loca de contenta.
Va a ser una madre maravillosa. Se va a dedicar a su hijo en cuerpo y alma.

Sólo quisiera que no cometiese los mismos errores que comenten muchas mujeres, que no se centre sólo en el bebé, que no se olvide de su pareja, el padre de su hijo, él estuvo muy preocupado por ella. Y ella tiene mucho amor que dar, suficiente para los dos.

Llevo una racha... consejos vendo y para mi no tengo.

¡Qué seáis muy felices los tres!, junto con Nan, vuestra perrita, no me olvido de ella. Los cuatro.

¡Ah! se me olvidaba, Zapatero, 2.500 euros más, sorry!



¡¡¡BIENVENIDO MATEO!!!